Se celebra desde 2003 con el fin de promocionar el vino de Santa Maria del Camí, con una larga tradición viticultora.
La fiesta comienza con la llegada a la plaza de la Vila del carro portador de las ramas de pino, que se entregan a las bodegas del pueblo para que las cuelguen en lo alto de su portal principal. Una antigua costumbre para anunciar el inicio de la venta del vino joven. Hay concursos de degustaciones de vino, barbacoas y música popular. La celebración se alarga hasta el 2 de diciembre, con talleres, actos, visitas a bodegas y todo tipo de acciones relacionadas con el vino. Puede descargar el programa completo aquí.